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Dirección: Lars von Trier
Reparto: Charlotte Gainsbourg, Stellan Skarsgård, Stacy Martin, Shia LaBeouf, Jamie Bell, Willem Dafoe, Mia Goth
La cinta inicia justo donde nos quedamos, comienza con el mismo disclaimer de que la película fue editada bajo el consentimiento de von Trier, pero sin su aprobación (esto por cuestiones de distribución ya que como se mencionó en la nota anterior, el corte original sin censura dura alrededor de 5 horas y media. Si así inició el segundo volumen de NINF()MANÍA, así iniciamos también el recuento de la misma, sin preámbulo, sin tapujos ni cortes.
Capítulo VI – Manteniendo el rítmo
Joe (Gainsbourg) sigue contando la anécdota de su ninfomanía a Seligman (Skarsgård) y como es que su depravación alcanza límites inimaginables. Pero claro, von Trier sigue siendo meticuloso y despiadado cuando se lo propone, por lo que a través de la cinta tenemos imágenes que nos disturban a otras que se agradece que solo se utilicen a manera de metáfora.
Los leitmotivs siguen siendo los recurrentes bien adaptados desde el primer volumen. La sonata para piano y violín en A mayor de Cesar Franck, El réquiem en D menor: Requiem Aeternam de Mozart, Das Rheingold, Scene III: Verwandlungsmusik de Wagner forman parte trascendental del acompañamiento que se logra en el aspecto visual de von Trier.
Capítulo VII – Una distribución acertada
En esta ocasión, resultó una grata e inesperada sorpresa el lanzamiento del segundo volumen tan pronto en México, tratándose sobre todo de una película europea de un director independiente –su cinta anterior Melancolía tardó casi dos años en exhibirse en cines, para cuando llegó el 98% de morbosos/fans/hipsters ya la habían visto en línea [obviamente pirata] confieso ser de los pocos que esperó a verla en este gran formato– por lo que hago una atenta mención a la casa distribuidora Zima Entertainment, y un aplauso honroso por dar este esfuerzo ya que la película se estrenó en las principales plazas comerciales del país simultáneamente.
Creo que un buen –y merecido intento– habría sido estrenar ambas partes al mismo tiempo o simplemente estrenarlas en un solo conjunto y marcar un intermedio como bien se hacía en épocas de antaño. Vaya si esto se permite actualmente en funciones de teatro, ópera y ballet de duración extendida por actos, que valga la pena también en hacerlo en este tipo de entregas que valen la pena ver de corrido.
Hace pocos años, se estrenó una cinta portuguesa-chilena de esta manera “Misterios de Lisboa” magistral obra del ahora fallecido realizador Raoul Ruiz. Esta película –y también miniserie– tenía una extensión de 4 horas y media, por lo que se le daba un intermedio al espectador a la mitad de la cinta para chance de ir al baño, refillear sus palomitas o refresco, etc. Evidentemente este lanzamiento fue limitado y solo se presentó en cinetecas independientes.
Capítulo VIII – El final inaplazable.
Volviendo al tema, von Trier cierra con este volumen, su trilogía de la depresión la cual desde su inicio fue polémica con la cinta Anticristo del 2009 y le siguió la mencionada Melancolía en 2011. Este conjunto de cintas, ya sea que se admiren/analicen por junto o separado, muestran facetas del director que denotan una clara evolución en su manera de contar historias en celuloide, el esfuerzo en conjunto se aplaude de una manera arrolladora, y si es que eres seguidora o seguidor de von Trier, sabes a lo que me refiero… Termina esta cinta y quieres inmediatamente más y más y más de este retorcido cineasta danés.
El reparto es sumamente acertado, –como bien comentábamos con anterioridad– Shia LaBeouf se sostiene y sigue manteniendo un personaje de coraje y sentimiento –ahora se entiende mejor el asunto de porqué posiblemente ha decidido dejar un tanto atrás el mundo de la actuación después de esta cinta, aunque igual puede ser una estrategia al estilo Joaquin Phoenix como cuando quiso hacerla de rapero–. Las nuevas adquisiciones para este segundo volumen, destaca Jamie Bell quien dista a leguas de ser aquel niño introvertido de la cinta Billy Elliot del año 2000, su personaje tiene solida seriedad y dureza en la cinta.
Y del resto del reparto pues… ¿Qué más se puede decir de figuras como Willem Dafoe, Skarsgård y Gainsbourg? Impecables, sublimes y nos dejan sin palabras.
El preámbulo antes de llegar el final –Tranquilo público, ningún spoiler será lanzado– es la mejor explicación de cómo es que Seligman encuentra a Joe en ese callejón al inicio de la cinta, nos dejará al filo de la butaca y sin aliento durante varios minutos. Y eso si el “Grand finale” es algo que u odias o lo amas, particularmente todavía tengo un sabor sweet and sour desde anoche que tuve oportunidad de presenciarlo.
Clasificación: Evidentemente estás aquí porque ya sabes de el primer volumen, porque eres fan de von Trier, o porque tenías morbo de que te contara cuantos encuadres se utilizan de órganos sexuales. Cualquiera que sea la razón te diré: Corre, corre y acude a tu cine más cercano, y deja que la gracia, el masoquismo, la soledad, y la inexplicable historia que Joe le cuenta a Seligman, te atrape por completo. Ninfomanía llegó para marcar y dejarte preguntas sin respuesta incuestionable, -o que solo pocos se atreven a formularse en el silencio de su marginación sexual-.
How do you keep a wave upon the sand?
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