Héctor y el Secreto de la Felicidad
Titulo Original: Hector and the Search for Happiness
Direccion: Peter Chelsom
Reparto: Simon Pegg, Rosamund Pike, Toni Collette
En general me considero una persona feliz, pero hay algo sobre las películas que tratan sobre la felicidad que me dan como flojera y no importa si son buenas o malas, les tengo mala fe. Me pasó con La vida secreta de Walter Mitty y Rezar, Comer, Amar.
Héctor (Simon Pegg) es un psicólogo que vive una vida bastante cuadrada y que se da cuenta que ha perdido el “toque” y no logra que sus pacientes sean felices. Así que decide emprender un viaje por varios países para investigar que hace a la gente feliz.
Es así como Héctor pone en espera su vida y a su novia Clara (Rosamund Pike) y se dedica a viajar y a conocer gente para saber cuál es el éxito de la felicidad. Estos personajes irán dando aventuras y “lecciones” que Héctor irá atesorando en su libreta de viaje.
La película está llena de caras conocidas como Rosamund Pike, Toni Collette, Jean Reno y Christopher Plummer. Sin embargo, la cara menos conocida es la de nuestro protagonista. Debo de decir que es bastante refrescante ver una cara nueva, además de que Simon hace una actuación bastante honesta de Héctor y te den ganas de acompañarlo en su viaje. Y lo mejor de todo es que no te aburres de verlo… para que se den una idea de lo que hablo, esta película nunca funcionaria con Ben Affleck.
Aunque es súper obvio en que va a terminar la historia, la película funciona bien y la verdad es que si te vas encariñando con Héctor y sus aventuras. Aunque como en toda película de “viaje espiritual” hay elementos que son bastante repetitivos y ya los vemos venir, sigue siendo una película disfrutable. Eso sí, hay que ir con ganas de ver una película edificante y sabiendo que vamos a encontrar, porque avanza a su propio ritmo y tampoco tiene mucho factor sorpresa, así que hay que ir con paciencia.
Es probable que la película no te cambie la vida y tampoco estoy segura si al final de ella salgas súper feliz, lo que sí creo es que hay pequeñas decisiones que podemos hacer diariamente para ser un poco más felices.
Ir a conocer a Hector con una crepa y un café es una de ellas.