La diferencia entre cine comercial y cine de arte (o de autor) es que el cine industrial entrega productos de entretenimiento que a veces llegan con muy poca propuesta y en ocasiones recurre —con el objetivo de provocar alguna respuesta emocional en el espectador— a trucos muy probados como usar música para decirnos qué sentir o dejar que brinque un gato del closet para espantarnos. El cine comercial es un producto, un dulce fabricado en serie que sostiene a su propia industria y nos entretiene.
Cómo Entrenar a tu Dragón 2 es un productazo, un excelente hijo de la mercadotecnia, una película vacía pero tan bien hecha que te dejará satisfecho en el momento, aunque olvidarás al día siguiente.
Qué tiene de bueno
No me imagino algo más atractivo para un niño que tener como mascota a un dragón. Estas bestias son cariñosas, te defienden del peligro y se dejan montar para llevarte a las alturas. El 3D luce impresionante en las secuencias voladoras y la variedad y diseño de los dragones —que se prestan para la vendedera de muñequitos— hacen que la vista nunca se nos aburra. El mundo de los vikingos montadragones se expande en esta película para adentrarnos en la complejidad social de esta especie ficticia.
Qué tiene de no tan bueno
Aunque los dragones están presentes en toda la película, la historia principal no se centra en ellos, sino en los humanos. En la primera película el protagonista se debatía en medio de los problemas típicos de un adolescente vikingo, ahora el muchacho se enfrenta a una serie de revelaciones, pérdidas y traumas familiares, suficientes para destruirle el alma a cualquier persona. Por fortuna Hiccup parece tener una memoria emocional de cinco minutos, así que todos tranquilos, no importa lo desgarradora que sea la situación que enfrente, para la siguiente secuencia él estará como si nada.
De qué trata la historia
Hipo sigue evadiendo las responsabilidades que le implica ser el hijo del jefe. Para esto se inventa la tarea de expandir el mapa de los mares vikingos con la esperanza de encontrar otro dragón igual a Chimuelo, su mascota escupefuego. En uno de estos viajes se topa con cazadores de dragones que amenazan con iniciar una guerra, pues lo confunden con un misterioso jinete de dragones, que resulta vivir en una isla oculta protegida por un tipo de dragón desconocido hasta el momento. Una isla llena de dragones, dragones, dragones.
Diagnóstico final
La película es un buen producto de entretenimiento, pero tan vacío en su contenido humano que su error quizá es dedicarle demasiado tiempo a profundizar en su propia historia. Sin embargo, los dragones rescatan la experiencia dándonos una buena dosis de bromas, batallas e impresionantes secuencias voladoras.
Cómo entrenar a tu dragón 2
- Director: Dean DeBlois, Chris Sanders
- Lo mejor: El rey de los dragones está impresionante
- Lo peor: Los humanos, ojalá la hubieran hecho como los antiguos documentales de Disney, con puros animales que no hablan
- Recomendaciones adicionales: Como en toda secuela, los personajes apenas si se nos presentan, así que si no has visto la primera vale la pena buscarla, además es mejor película