Dirección: Alejandro Sugich
Reparto: Manuel Balbi, Eiza González, Sara Maldonado, Adan Canto, Julio Bekhor, Rodrigo Virago, Livia Rangel, Claudia Ramírez, Gabriel Retes, Mario Almada.
Ir a ver una película mexicana a las salas me es difícil el llegar a verlas, tener un poco de reservas y prejuicios es casi el común denominador al asistir a la butaca sabiendo que de por medio veré una obra acuñada en el país de los agachados y donde ha reinado una política falsamente democrática a casi 100 años de que en teoría se elige a los gobernantes por una supuesta elección popular.
Pero dejando los temas que aquejan a este pobre país que se niega a despertar, hay un puñado de cintas que logran sobresalir con el paso del tiempo y que al menos traen un aliciente de que algo se hace bien en esta industria que lucha por subsistir y consagrarse como un negocio real.
Casi tr3inta propone justamente eso, el vivir, el soñar, el alcanzar las metas descartadas y tomar por rienda nuestra vida e ir por lo que verdaderamente deseamos. Este tipo de ‘empujones’ en la ficción, vienen bien entre las comedias insulsas, o películas que pretenden llegar al mainstream hollywoodense, porque justamente no compite contra el astro universal del cine, al contrario, busca refrendar que el motor de la vida son las ideas que se acuñan en casa.
Con una narrativa ligera pero bien lograda, conocemos la historia de Emilio, un alto ejecutivo que tiene todo en la vida, un trabajo y puesto envidiable, un departamento de lujo y el status social que el dinero puede comprar. Pero el tener todo en la vida es justamente estar llenos de vacíos, Emilio siente que ha desperdiciado su vida al borde de pasar al llamado ‘Tercer piso’ ya que nunca logró su sueño de ser escritor. Un viaje a su ciudad natal en Sonora le hace recordar los propósitos de su vida adulta, y el reencuentro con sus amigos le hace valorar un posible cambio en el futuro.
Con actuaciones medianamente buenas -de estilo telenovela- podemos dejar a un lado esta falta, ya que visualmente la cinta trae consigo añadiduras que la hacen fresca. Locaciones de claro apoyo presentado por el gobierno de Sonora, se agradece que el gobierno estatal preste ayuda al cine y lograr productos que beneficien al público mexicano.
El Licenciado en Economía y ahora cineasta Alejandro Sugich, demuestra con talento el porte de la silla en la dirección, con este su tercer trabajo al mando en este puesto. Aunque al inicio de la cinta el primer disclaimer que se menciona es que es una obra de ficción sin basarse en la realidad, es claramente una influencia en la vida personal del autor, los hechos que vemos a cuadro.
En una sociedad en la que domina el ‘godinismo’, esta película llega para decir y aplaudir el ‘si se puede’, como reza el tema músical utilizado en la cinta “Hay que vivir” de Delta wave. Y hablando del aspecto musical, la selección de tracks y grupos musicales es un deleite para los oídos, ya que en el filme se incluyen canciones de Phantogram, Icebird, Cults, Chico sonido, entre otros.
Clasificación: Esta cinta es para aprovecharla en un día relax, entender su mensaje y atrevernos a dar un paso adelante con nuestras ganas de vivir y hacer un cambio en nosotros. Tampoco estoy hablando de que transformará nuestras vidas, pero sería bueno seguir el ejemplo del protagonista, cuestionarnos si realmente estamos haciendo lo que queremos dejar para un futuro.
Saludos al borde de los treinta.