No sé si cortarme las venas o dejármelas largas
Me atrevería a decir que esta película tiene el éxito asegurado en México, pero como no lleva la palabra “sexo” en su título, no les puedo prometer nada. Ni idea de dónde rayos surgió el nombre, pero la primera vez que lo leí me despertó la imagen de una mujer caminando con venas colgantes en los brazos, así como los flequillos blancos colgaban de la chamarra de Laureano Brizuela. Para nada venía al caso mi…